De la finca Infante de Lara en el paraje cordobés de Pragdenilla, se cultivan con mimo las jóvenes plantas de olivar de variedad picual.
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El vigor y juventud del olivar, la calidad del terreno, el agua proporcionada por el acuífero de la finca y el conocimiento de los mejores expertos Ingenieros Agrónomos, hacen que la materia prima que se produce en Infante de Lara sea inmejorable.
Las técnicas de producción tradicionales unidas a las prácticas de recolección, molturación y extracción de alta calidad, dan lugar a un aceite de olor, sabor y características admirables.
El posterior envasado, etiquetado y embalado se realiza de forma artesanal.
Todo el proceso, desde el olivo hasta el producto final se realiza a mano, aportando un valor añadido en el cuidado de los más mínimos detalles de calidad y presentación del producto.
Los productos de Infante de Lara son 100 % naturales, resultado de técnicas agronómicas que respetan el medio ambiente y no agreden el fruto.
El aceite de nuestros productos es de oliva virgen extra, directamente del árbol al envase.
